El Superclásico ya se palpita en cada rincón del país. Pero en el predio de Boca en Ezeiza, el clima es una mezcla de expectativa e incertidumbre. Cuando faltan solo cuatro días para el duelo de cuartos de final ante River por la Copa de la Liga, dos nombres encendieron las alarmas xeneizes: Edinson Cavani y Kevin Zenón.
Ambos futbolistas terminaron con molestias tras el partido frente a Godoy Cruz, y aunque en el cuerpo técnico reina el optimismo, aún no tienen asegurada su presencia para el domingo en Córdoba.
🩺 El parte médico: calma, pero con cautela
Cavani, que ya había quedado al margen del último encuentro por una sobrecarga en el isquiotibial izquierdo, volvió a entrenarse de forma diferenciada. Si bien no hay lesión muscular, el uruguayo sigue bajo observación del cuerpo médico. Su recuperación está en marcha, pero la definición se tomará a último momento.
Por su parte, Kevin Zenón, una de las revelaciones del semestre, también presentó molestias musculares leves y fue preservado en los primeros entrenamientos de la semana. En principio, se trata de una sobrecarga sin gravedad, pero la idea es no exigirlo de más en estas horas decisivas.
🧠 El plan Martínez: no arriesgar, pero tampoco resignar
El DT Diego Martínez es consciente de lo que se juega su equipo el domingo en el estadio Mario Alberto Kempes. Por eso, apuesta a tener a Cavani y Zenón en plenitud, aunque no descarta variantes tácticas en caso de que alguno no llegue.
Si el uruguayo no está al 100%, el cuerpo técnico evalúa mantener como referencia ofensiva a Miguel Merentiel, quien mostró buen nivel como titular. En el caso de Zenón, su posible reemplazante natural es Jabes Saralegui, aunque también podría correrse Cristian Medina hacia un rol más ofensivo.
🔥 Un Superclásico que arde
El cruce entre Boca y River del próximo domingo (a las 15.30) no será uno más. Se jugará en cancha neutral, con hinchas de ambos lados, y en un formato de eliminación directa. Boca llega con envión tras asegurar su clasificación en la última fecha, mientras que River lo hizo con antelación y rotó piezas.
Cavani ya jugó un Superclásico y quiere revancha. Zenón, en cambio, se preparaba para debutar en este tipo de partidos y su presencia es clave por su desequilibrio y pegada. La posible ausencia de ambos sería un golpe duro, pero nadie en Boca los descarta aún.
