En el rincón más pintoresco de la localidad de Alvear, un viejo almacén se convierte, casi de manera mágica, en el escenario de una historia que atraviesa fronteras. “Empieza el Baile”, una comedia dramática con producción española y argentina, ha elegido este lugar, con su historia y su esencia intacta, para rodar una de sus escenas clave.
El filme, que cuenta con la participación estelar de Mercedes Morán, Darío Grandinetti y Jorge Marrale, se centra en el reencuentro de una pareja de tango, cuya historia se ve marcada por el paso del tiempo y la distancia. Marina Seresesky, directora y guionista de la película, ha trazado un camino que llevará a los protagonistas a través de varias locaciones en Argentina y España.
Sin embargo, fue en Monte Flores, un barrio histórico de Alvear, donde el rodaje dio un giro inesperado. El almacén de Banfi, un emblema de la tradición local, fue el elegido para dar vida a una de las escenas más emotivas de la película. Pablo Romano, productor del film, no tardó en explicar la elección: “Encontramos una locación preciosa que la directora estaba buscando. Se enamoró de este lugar, de su historia y su calidez. Este almacén, con su aire tan particular, será el descanso de los personajes en su viaje, y allí se desarrollará una secuencia fundamental para la trama.”
Lo que hace aún más especial a esta producción es la posibilidad de que los propios vecinos de Alvear se sumen como extras en la película. En un acto de integración genuina, se buscó que los rostros de la localidad, los verdaderos protagonistas de este espacio, formaran parte de la historia. “Queremos que cada lugar aporte lo suyo, que no sea solo un decorado. Es por eso que buscamos gente de Alvear para que se sienta parte de la película”, comentó Romano.
Con el rodaje ya en marcha en Buenos Aires, las filmaciones se trasladarán a Rosario y Alvear entre el 15 y el 20 de enero. Después, será el turno de Mendoza, y finalmente, a finales de febrero, la historia llevará su magia hasta Madrid.
El barrio Monte Flores, uno de los más antiguos de la región, es el testigo silencioso de los primeros pasos de la historia de Alvear. Con una escuela que cumple 170 años y una tradición que se respira en cada rincón, el almacén de Banfi representa lo que fue la vida cotidiana de antaño: un punto de encuentro de viajeros, vecinos y comerciantes. A orillas del antiguo camino real, uniendo Rosario con el sur de la provincia, el almacén de Banfi ha sido por décadas una parada obligada, con su estilo único que recuerda los viejos tiempos, cuando los ramos generales ofrecían de todo, desde un alfiler hasta repuestos para carruajes.
Y así, el cine llega a este pequeño pedazo de historia. Un lugar, hasta ahora casi olvidado, que se convierte en el escenario de una película que unirá, una vez más, la danza, el tango y el cine.
