Práctico, sabroso y accesible, este alimento supera al huevo en aporte proteico y ofrece múltiples beneficios para la salud.
Los huevos han sido históricamente considerados uno de los alimentos más completos: ricos en proteínas de alta calidad, casi todas las vitaminas esenciales y un gran aliado para dietas equilibradas. Sin embargo, su consumo no siempre resulta práctico. Requieren cocción y conservación adecuada, lo que limita su uso como snack.
La buena noticia es que existe una alternativa igual de nutritiva, fácil de conseguir y lista para consumir. Se trata de un alimento popularmente considerado fruto seco, pero que pertenece en realidad a la familia de las legumbres: el maní.
El maní: más proteínas que el huevo
Según datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), 100 gramos de maní aportan alrededor de 25 gramos de proteínas, superando ampliamente a un huevo grande, que contiene en promedio 7 gramos.
Además del impresionante contenido proteico, el maní ofrece grasas saludables (mono y poliinsaturadas), fibra dietaria, minerales esenciales como magnesio, fósforo, potasio y zinc, y vitamina E, con alto poder antioxidante.
“El maní no solo iguala al huevo en calidad nutricional, sino que lo supera en practicidad y versatilidad”, destacan nutricionistas especializados en alimentación funcional.
Beneficios del consumo de maní
Los aportes del maní a la salud van más allá de las proteínas. Su consumo regular puede traer numerosos beneficios:
- Grasas saludables: ayuda a reducir el colesterol LDL (“malo”) y a mantener niveles adecuados de HDL (“bueno”), favoreciendo la salud cardiovascular.
- Saciedad y control de peso: su combinación de proteínas y fibra prolonga la sensación de saciedad, lo que colabora en la regulación del apetito.
- Antioxidantes naturales: contiene polifenoles y fitoesteroles que combaten el estrés oxidativo y podrían prevenir enfermedades crónicas.
- Micronutrientes clave: fortalece el sistema inmune, mejora la salud de la piel y el funcionamiento del sistema nervioso, además de contribuir al metabolismo energético.
¿Snack o reemplazo?
Si bien no se trata de un sustituto directo del huevo en todas las preparaciones, el maní es una opción excelente como snack proteico o complemento en dietas vegetarianas y activas. También puede incorporarse en cremas, licuados o mezclas de frutos secos.
En resumen, si buscás una opción natural, portátil y rica en nutrientes, el maní se presenta como una alternativa ideal. Porque no solo alimenta: también nutre, protege y acompaña.