En el corazón de barrio La Paloma, en Timbúes, algo está cambiando. Lo que durante años fue un reclamo de los vecinos, hoy se traduce en obras concretas: veredas que se construyen, calles que se consolidan, luces que se encienden, y un Estado presente que planifica, ejecuta y transforma.
El Plan Integral de Mejoramiento Barrial, impulsado por la gestión del presidente comunal Antonio Fiorenza, llegó para quedarse. Y lo hace con una mirada integral que une infraestructura, servicios esenciales y espacios públicos, en un trabajo sostenido que avanza paso a paso, con sentido de comunidad.
“Se trata de una política pública que se despliega en cada rincón de Timbúes con obras concretas y sostenidas”, señalaron desde la comuna.
Obras que se ven y se sienten
Actualmente se ejecutan trabajos de cordón cuneta, una mejora clave para el escurrimiento del agua y la circulación segura. También se avanza con la construcción de veredas, fundamentales para garantizar una movilidad peatonal segura y accesible.
Además, se están instalando postes de hormigón y tendido eléctrico, tanto para el alumbrado público como para el suministro domiciliario, junto con un nuevo generador eléctrico, que garantizará un servicio más confiable y estable.
Lo que ya está hecho
Esta transformación no comenzó hoy. En 2024 se realizaron dos obras claves que sentaron la base:
- Recambio total de cañerías vinculadas a la bomba de agua del barrio, mejorando notablemente el servicio de agua potable.
- Puesta en valor del playón deportivo, un espacio que volvió a latir con vida propia: pintura, reacondicionamiento y mejoras generales lo convirtieron nuevamente en un punto de encuentro para chicos, jóvenes y familias.
Una gestión con mirada barrial
“Este conjunto de obras reafirma el compromiso del gobierno comunal de transformar la realidad de nuestros barrios con planificación, inversión pública y obras que mejoren la infraestructura urbana y la calidad de vida. Seguimos trabajando juntos en cada barrio y con cada vecino”, expresó Antonio Fiorenza.
Timbúes avanza. Y lo hace barrio por barrio, vereda por vereda, con un rumbo claro: mejorarle la vida a su gente.