Federico Boglione, referente del grupo agroindustrial Los Lazos, hizo una fuerte denuncia contra la industria del juicio laboral durante el Congreso de Agronegocios en Rosario: “Agarramos a tres empleados robando, los filmamos, confesaron ante escribano público, pero terminamos pagando porque la Justicia nos falló en contra”.
El empresario sostuvo que en primera instancia ganó el caso, pero que luego la Justicia revirtió ese veredicto en segunda instancia, obligándolo a indemnizar a los empleados, a pesar de las evidencias.
Críticas a la industria del juicio laboral
Boglione usó el ejemplo para cuestionar el modelo laboral argentino: dijo que muchas empresas “pierden todos los juicios laborales” y que esto desalienta la inversión y la formalidad.
Su llamado es claro: “Tiene que haber un cambio desde la Justicia”. Para él, si no hay reforma, mantener un negocio serio con empleos regulares será cada vez más difícil.
Otro foco: la informalidad fiscal
Además, Boglione planteó que la informalidad es un gran problema estructural. Señaló que en su negocio lácteo se estima un 45 % de informalidad.
Reclamó que el Estado debe ampliar la base de aportantes para que “todos paguen impuestos” y así se puedan bajar las cargas fiscales.
Riesgos empresariales según Boglione
El empresario confesó que el impacto personal fue fuerte: dijo que “le dio ganas de cerrar toda la empresa” tras perder el juicio.
Advirtió que la “industria del juicio” y los procesos laborales poco previsibles podrían comprometer la sustentabilidad de las compañías y su capacidad de generar empleo.
